hack

(del verbo Inglés “to hack”, que significa “cortar”) es un término con el cual se refiere a la re-configuración o re-programación de un sistema, de una forma no prevista originalmente por el propietario, el administrador o el diseñador. Los cambios pueden mejorar o alterar el funcionamiento del sistema (tanto hardware, como software), particularmente si se trata de una solución creativa o poco convencional a un problema. Los efectos de un hack pueden ser tanto beneficiosos como perjudiciales, sin que exista un juicio previo de intención o resultado en el término. El hack está mal visto entre las compañías dedicadas al desarrollo de sistemas hardware o software, pudiendo, incluso, conllevar problemas judiciales, debido a que dichas modificaciones pueden violar las condiciones de uso del producto o servicio. El término tiene varios significados relacionados con la tecnología y la informática, en el ámbito de la depuración de programas: puede referirse tanto a la corrección rápida e inteligente de un programa, como significar la solución de un problema informático de forma impropia o poco elegante (solución rápida), como un “remedio” o “apaño”. A la persona que se encarga de hackear o modificar una máquina o programa, se le llama hacker.